Cuando comiencen los estelares proyectos hacia el nuevo universo, la paradoja será sólo una ilusión que se recordará como un ayer trascendido. Transmutados los sentidos, no habrá cabida para las palabras repetidas. Translúcidos pensamientos de naturaleza única: irrevocablemente todo volverá a la esencia, al origen, al principio. El tiempo que deba transcurrir hasta esta meta varia respecto de lo que cada uno conciba como necesario: el paso del tiempo es una prolongación mental de la existencia, y la existencia, es una marea infinita...
Somos océanos.
Nos reencontramos en las diminutas gotas de agua que llenan de lágrimas el mundo, de alegría y humedad.
Nos toca ser los canales por los que circule "el fluido".
Largas pausas nos esperan, allá, en el allí de los círculos, en el aquí de los siempres, en el nunca de los determinantes vacíos, en las olas de la suerte transparente, en los llamados intrapsíquicos, en donde las estrellas se visten de humanos que se saludan con abrazos, en donde los caracoles son los más rápidos, en los espejos dimensionales que convierten la luz en ESO divino, trastes trastocados tras la trasiega de las trasferencias...
¿Qué me digo cuando te hablo?
Conexión...
Dejemos morir lo permanente para surgir así lo vivo transformante.
Dejemos que cambie el cambio.
Vivamos como nunca pudimos imaginar, a través de lo desconocido.
